Presencias

2017-2020

Esta serie se plantea como un deliberado retorno a la inocencia y naturalidad original que, como es lógico, se va desvaneciendo conforme adquirimos conocimiento y experiencia. Seta vez me propongo volver sobre mis pasos y rescatar olvidados alientos creativos, sobre todo, los más libres, irónicos e irreverentes. Mi intención es, también, reducir la carga conceptual y aligerar las ínfulas que provocan la moda y los prejuicios intelectuales de nuestros días.

Puede ser que por la mentalidad dominante, esta propuesta sea tachada de ingenua o anticuada. Reconozco que la inspira una particular candidez, y que revela cierta añoranza por el dibujo y la pintura abstracta del siglo pasado; sin embargo, la asumo como una importante motivación para desprenderme de absurdas ataduras, como la de tener que trabajar dentro del rigor y solemnidad de una serie convencional.

Nuevo conjunto abstracto, coherente con los criterios contemporáneos que busca provocar asociaciones y tender puentes entre la figuración y la abstracción. La idea es generar una propuesta contemporánea, pero congruente con mi identidad y compromiso artístico de siempre. Pienso que el arte se ha convertido en algo demasiado racional. Ojalá pudiéramos volver a mirar sin tanta solemnidad, sin tanta explicación. Entiendo la obsesión contemporánea por el concepto, pero a mí me gusta el arte simple y directo que entra por los ojos, que invade la retina, que apasiona sin rollos ni teorías.